¡Boo! Soy un escritor de terror

«La ficción trata de pasiones humanas».

Gregory Cohen.

¡Hola! Encantado de conocerte. Soy Aarón Jesús de la Cerda y este es mi sitio de locuras. Me encanta escribir y enseñar a la audiencia a apreciar el terror como arte.

Soy escritor y guionista de ficción. Tengo predilección por la ficción extraña, tanto como mi carácter. A veces, también hago de narrador oral. Dicen que soy bueno.

¿Sabías que los cuentos de terror nos han acompañado durante, prácticamente, toda nuestra existencia como humanidad?

Es por eso que fascina cualquier tipo de ficción que involucre una distorsión de la realidad. Terror en todas sus formas, Ciencia-Ficción, Fantasía Oscura. Adoro el arte creativo y los profundos recovecos que explora para incitar una purga de pasiones humanas que no podríamos experimentar de otra forma.

Me dedico a ello como objetivo de vida y soy muy feliz con mi decisión.

Trayectoria

Escribo hace diez años, desde que era un egresado universitario dedicándose a un oficio que nunca me gustó. Todo partió con el anhelo de escribir un libro cuando fuera viejo.

Como verás, la ansiedad me tiene aquí.

Me especialicé en Guion de Cine y Televisión, aunque tengo predilección por la Literatura y algunas incursiones por el Guion Sonoro. La mayor parte de mi conocimiento es autodidacta, aunque siempre estoy buscando nuevas instancias y ejercicios para mejorar mi escritura. Gracias a ello manejo gran cantidad de recursos que podrás ver en mis obras.

Y desde siempre fui fan del terror. Es, simplemente, mi carta astral.

En esta página podrás ver todos los proyectos en los que he trabajado, y dónde encontrarlos.

Estilo

Escribo como soy: imaginativo, dramático, crítico y con cierto sentido del humor negro, algo que encanta a las personas que tienen contacto conmigo. Soy un soñador apasionado y de comportamiento algo excéntrico. Algunas personas me consideran intenso, aunque es precisamente esa característica la que se ha convertido en mi mayor fortaleza como artista.

Me gusta imaginar mundos raros. En ellos hay simbolismos que critican la realidad en que viven los artistas, y que pueden mostrarnos caminos que, de otra forma, no podrían caminarse; o exponer opiniones peligrosas para ciertas personas.

He vivido en varios lugares y he ejercido diversos oficios. Gracias a eso, aprendí a conocer a las personas y a relacionarlas con sus entornos. Son esas experiencias las alimentan el corazón de mis historias.

Cuando hablo de la ciudad y del «progreso»: una tormenta proveniente de una marea de gente intensa, agresiva y, sobre todo, violenta hasta con sus propias tradiciones.

Cuando hablo de los pueblos donde estuve, rescato el misticismo, la alegría, la pasión y la intensidad de la mitología rural. Hablo de relatos con moralejas y del imaginario propio de la gente que convive con los misterios de la naturaleza y el abandono.

Y cuando hablo sobre las personas, expongo la dimensión del mundo interior, un camino de incertidumbre y de ansiedades, donde solo se convive con los propios monstruos internos que se manifiestan en las cosas que conocemos o creemos conocer.

Ofrezco una ficción crítica, explicativa e imaginativa, con la ambición de entretener a las personas a través de monstruos y rarezas metafóricas que discuten los problemas de la sociedad. De hecho, apuesto por el inmenso potencial de la ficción de género para generar drama; sobre todo si es con algún afán crítico y moderno. Mis temas preferidos son aquellos que narran los males de este siglo: la proliferación de enfermedades mentales, las injusticias de este siglo, el acoso desmedido hacia el medio ambiente, los fanatismos políticos y religiosos, y la ignorancia normalizada en un período de máxima información y poder tecnológico.

«Ni los monstruos ni la fantasía más extraña son más sórdidas que la naturaleza de algunos seres humanos».

Aarón Jesús de la Cerda.

Motivaciones

Mi motivación es entretener y, asimismo, enseñar a las personas sobre el entorno en el que viven.

La ficción históricamente ha revolucionado los pensamientos de las personas. Es por esta razón que uso moralejas para sembrar las semillas de la duda en la audiencia; esa misma que les permite pensar y, asimismo, crecer. En mis historias, te guiaré a través de mi propia voz, con un tono duro, a veces rudo, y sin tapujos para hablar hasta la sordidez máxima sobre cualquier tema que necesite ser enfrentado.

En resumen, mis historias son una forma entretenida de enfrentar al mundo. Es una ficción extraña, a mi estilo.

Y por eso estoy seguro de que te encantará.

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